La Comisión Europea impuso ayer una multa conjunta de 1.106 millones de euros a E.ON y a GDF Suez por repartirse el mercado de gas francés y alemán desde 1975 al 2005. La comisaria europea de Competencia, Neelie Kroes, afirmó que, con esta sanción, quiere enviar "una seria advertencia" a los suministradores tradicionales de energía de los países de la UE de que el Ejecutivo comunitario "no tolerará ningún tipo de comportamiento contra la libre competencia. Además, el reparto de mercados constituye una de las formas más graves de violación de las reglas de competencia".