Ni los planes del inversor estadounidense Warren Buffett, el oráculo de Omaha, de inyectar fondos en Goldman Sachs animaron a los mercados. La bolsa española, que comenzó el día con ligeras ganancias, acabó en terreno negativo por tercer día consecutivo.

El Ibex 35 cedió el 0,57%, lastrado por Telefónica y otros valores de peso, en una jornada marcada por la inyección de liquidez por parte de la Reserva Federal de EEUU (Fed) junto a otros bancos centrales. Pero ninguno de estos movimientos obró milagros. El principal indicador bursátil español no logró mantenerse en la cota de los 11.200 puntos, en la que quedó ayer y terminó la sesión en 11.112,9, con solo 14 valores en positivo y el resto en números rojos.

Mientras el presidente de la Fed, Ben Bernanke, y el secretario del Tesoro norteamericano, Henry Paulson, continuaban su defensa del plan de rescate financiero del Gobierno de Bush ante el Congreso de EEUU para evitar la debacle económica, Wall Street entraba en terreno negativo y contagiaba al Viejo Continente, donde las principales plazas terminaron con los paneles teñidos de rojo. Londres acabó la jornada con un recorte del 0,8% y Fráncfort, del 0,3%.

En la bolsa española, el volumen de negocio fue de 3.845,8 millones de euros, de los que 960,7 millones correspondieron a Telefónica, 405,3 millones al Santander y 302,1 millones, al BBVA.

El mayor descenso de todo el selectivo madrileño fue para Sacyr Vallehermoso, que retrocedió el 7,17%, seguida muy de lejos por Telefónica (-3,73%). En el sector bancario, los valores recibieron con signo dispar los últimos episodios de las turbulencias financieras. Bankinter, el Popular y el Santander se escaparon de las pérdidas, con avances del 2,96%, 0,46% y 0,29%, respectivamente. Por contra, retrocedieron el Sabadell (-0,52%), Banesto (-0,3%), y el BBVA (-0,17%). Los mayores repuntes del Ibex fueron para Iberdrola Renovables (+4,39%) y Gamesa (+3,85%).