El presidente de Estados Unidos, George Bush, y sus colegas de Francia, Nicolas Sarkozy, y de la Comisión Europea (CE), Jose Manuel Durao Barroso, se han reunido en Camp David para tratar sobre la crisis financiera, ocasión que han aprovechado para anunciar una cumbre presidida por EEUU.Los dos mandatarios europeos llegaron a la residencia presidencial en Camp David (Maryland) sobre las diez de la noche de ayer, hora española, procedentes de Canadá, donde participaron en una reunión con el recién reelegido primer ministro Stephen Harper. El mandatario estadounidense invitó a Sarkozy y a Durao Barroso a EEUU para abordar con ellos la crisis financiera y analizar posibles ideas y propuestas para solucionarla cuanto antes.Breve comparecencia conjuntaEn una breve comparecencia conjunta, Bush ha anunciado que acogerá "en un futuro próximo" una cumbre de líderes de la comunidad internacional para coordinar la respuesta global a la crisis. "Deseo presidir la cumbre en un futuro cercano", ha dicho Bush, que ha explicado que tanto líderes de países desarrollados como de naciones en vía de desarrollo participarán en la cumbre. "Debemos estar abiertos a buenas ideas de todo el mundo y por eso estoy deseando escuchar hoy (propuestas) del presidente Sarkoyz y del presidente Barroso, y de otros líderes en los próximos días". "Es esencial que trabajemos juntos, porque estamos juntos en esta crisis", ha destacado."Poco después de las elecciones" de EEUU Tras la reunión, la Casa Blanca ha explicado que los tres líderes han tenido una "muy positiva discusión sobre la coordinación de pasos que se necesitan dar para resolver la crisis". Bush, Sarkozy y Durao Barroso han acordado que se pondrán la próxima semana en contacto con otros líderes para consultarles sobre la idea de "comenzar una serie de cumbres acerca de las respuestas al desafío al que se enfrenta la economía global". La primera cumbre, que se celebrará en EEUU "poco después de las elecciones generales", se centrará en revisar el progreso que se ha hecho a la hora de hacer frente a la crisis y en buscar acuerdos sobre "principios de reformas" necesarias para evitar que se vuelva a repetir esta situación. En cumbres posteriores, se acordarían "pasos específicos para poner en práctica esos principios", ha destacado la Casa Blanca.Horas antes, Bush aprovechó la ocasión para lanzar un mensaje de tranquilidad al mundo, al recordar que "con determinación y una acción centrada, superaremos esta crisis y nuestras economías volverán al camino de la prosperidad y de crecimiento duradero". Las grandes decisiones quedarán para la cumbre extraordinaria del Grupo de los Ocho --EEUU, Canadá, Rusia, Japón, Alemania, Reino Unido, Italia y Francia-- y de otras importantes economías mundiales, que previsiblemente se celebrará en Nueva York.La solución, en Nueva YorkPrecisamente, Sarkozy, ha destacado que, dado que la crisis se ha originado en Nueva York, "la solución global tiene que ser encontrada en Nueva York", tal y como propuso hace unos días. El mandatario francés afirmó además, que la cumbre debería tener lugar cuanto antes, "posiblemente" antes de finales de noviembre. Sarkozy ha destacado que "ésta es una crisis mundial, de manera que tenemos que buscar una respuesta mundial" a la misma. El presidente francés y Durao Barroso intentan convencer a Bush de que ahora es una buena oportunidad para dar un nuevo impulso a iniciativas dirigidas a coordinar mejor el control de los mercados financieros.Bush no ha respondido públicamente a las sugerencias de los dos mandatarios europeos, pero sí ha destacado que en esa crisis "es esencial que preservemos los fundamentos del capitalismo democrático", una opinión que compartió Sarkozy. No obstante, ha dicho que "no podemos continuar en la misma línea porque los mismos problemas desatarán el mismo desastre". Por último, Durao Barroso ha hecho un llamamiento a la coordinación global como respuesta a la crisis. "Ante estos desafíos sin precedentes necesitamos un nivel sin precedente de coordinación global", ha dicho. A juicio del presidente de la Comisión Europea, el sistema financiero internacional --sus principios básicos y sus instituciones-- "necesitan reformas". "Necesitamos un nuevo orden financiero global", ha destacado.