Los expertos coinciden en que el formato de súper seguirá creciendo en España por los nuevos hábitos de consumo y por la especial valoración de los usuarios a la compra de cercanía. Este modelo no se da en otros países, como Gran Bretaña y Francia, donde los híper copan el 56% y el 53%, respectivamente, de la superficie comercial total y superan a los supermercados.

El director general de la Asociación Española de Distribuidores (Asedas), Ignacio García, asegura que en España se implantó el modelo de híper en 1973 y que en los primeros años se produjo un crecimiento del 25% anual de este formato.

BATALLA A LA COMPETENCIA A raíz del desembarco de los híper, las cadenas de distribución españolas que gestionaban los supermerca-dos se dieron cuenta de que su única posibilidad era crecer en volumen. Las pequeñas empresas familiares comenzaron a crecer, a fusionarse y a asociarse. Esta estrategia les permitía competir en precio con los híper. "A igual precio, el usuario valora la proximidad", dice García.

En su opinión, los híper deberán cambiar su oferta, centrándose en los productos no alimentarios con valor añadido (ocio, espacio, electrónica, textil), mientras que los súper tendrán que apostar aún más por la proximidad.