La fiebre consumista de las familias españolas ha cesado y eso está pasando factura al empleo. Las ventas del comercio minorista volvieron a caer en julio (el 4,8% respecto al mismo mes del año anterior), por quinto mes consecutivo, y el empleo en el sector ha empezado a retroceder. Según la estadística que ayer difundió el INE, el nivel de ocupación en el sector retrocedió en julio el 0,1% respecto al total de personas que trabajaban en el comercio hace un año. Salvo un dato aislado en 1999, hay que remontarse a 1996 y 1997 para encontrar en esta estadística tasas negativas en el empleo.

Por tipos de establecimiento, el recorte de plantilla se ha concentrado en los comercios más pequeños, que son los que acusan una mayor caída en sus ventas. En las tiendas, la caída del 6,8% en la caja se ha visto acompañada por un recorte del 0,4% en el empleo. En las pequeñas cadenas, el negocio ha caído el 6,8% y el empleo, el 2,4%.

En las grandes cadenas (las de más de 25 locales, de menos de 2.500 metros cada uno), que es el único tipo de establecimiento donde suben las ventas (el 0,9%), el empleo sigue creciendo (el 3,2%). Lo mismo que en las grandes superficies, donde la plantilla de julio era el 1,3% superior a la de hace un año, pese a que sus ventas han caído el 4,6%.

LIBERALIZACION DE HORARIOS Para la Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA), los datos del INE confirman el "fuerte" impacto que la crisis tiene en el comercio familiar. UPTA incidió en el trasvase de consumo que en estos momentos se produce desde el pequeño comercio al mediano, un hecho que atribuye a la liberalización de los horarios comerciales. Por tipo de productos, la caída de las ventas ha sido del 1,2% en alimentación, y del 7% para el resto. El retroceso ha sido especialmente intenso en los artículos del hogar (el 11,5% menos).

El descenso de las ventas comerciales es generalizado en todas las autonomías. Los mayores recortes corresponden a La Rioja (7,7%) y Murcia (7,5%); los menores, a Castilla y León y Extremadura (el 1,5%). En Madrid, el comercio minorista encajó en julio un retroceso del 6,1% y en Cataluña, del 4,2%.

El deterioro del empleo se concentra en 9 comunidades. Sobre todo en Baleares (el 3% menos) y Murcia (2,1%). En Madrid, por el contrario, la plantilla crece el 0,7% y en Cataluña, el 0,2%.

En total, el comercio minorista da empleo a 1.959.800 personas, el 9,6% del total de ocupados en España, según los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) del segundo trimestre.

EL MAYOR ALZA DE LA UE En datos generales, el desempleo subió en julio en España tres décimas, hasta el 11,0% de la población activa, la subida más fuerte de toda la Unión Europea, según los datos facilitados ayer por la oficina estadística Eurostat.