Los directivos de las grandes empresas alemanas han visto caer sus salarios por culpa de la crisis. Así, 30 presidentes ganaron en el 2008 un 20,6% menos que en el 2007, según un estudio de la Asociación de Protectores de Accionistas Alemanes (DSW ). Pero para esta entidad, queda mucho trabajo para alcanzar reglas justas sobre la remuneración de los altos cargos. Así, la DSW denuncia que dos tercios de las empresas del DAX siguen calculando las bonificaciones en base a objetivos anuales o de corto plazo fácilmente alcanzables.