El consejero delegado de Endesa, Rafael Miranda, desveló ayer que en las alegaciones presentadas ante la Comisión Nacional de la Energía (CNE) ha pedido que no se ponga "ninguna condición a la oferta de E.ON". La eléctrica ha realizado las alegaciones considerando "cuál es el interés de nuestros accionistas", dijo ayer el número dos de la compañía.

De los requisitos que la CNE podría poner a E.ON para dificultar la oferta de la alemana y que, en parte, se amparan en la seguridad del suministro, recordó que Endesa tiene participaciones de hasta el 50% en algunos países. Citó el caso de Enersis en Chile, donde sí hubo problemas de suministro: "Lo hemos asegurado, hemos formado parte de la negociación y de la solución".

Sobre la participación de E.ON en centrales nucleares españolas, Miranda recordó que "algunas ya han estado en manos extranjeras" (EDF) como ha sido el caso de Vandellós I "en el pasado" y es la situación actual de la portuguesa EDP, que participa con porcentajes en algunas nucleares. En Europa "no me parece que sea ningún problema, siempre que se tomen medidas correctoras".

INFORMES Hoy mismo enviará sus razones a la Comisión, mientras que ayer por la tarde llegaron las de E.ON a través del despacho de Pérez Llorca. El consejo de la CNE escuchó al ponente, Jorge Fabra y examinó los informes de los servicios técnicos y jurídicos. La primera deliberación será el jueves. Es intención de parte de los consejeros aunar posiciones. El documento de Fabra puede acabar en un voto particular. El resultado de la mediación del exministro Carlos Solchaga, por encargo de Rodríguez Zapatero, puede sorprender.