El Ejecutivo español ha desplegado toda la diplomacia posible para que la Comisión Europea dé el visto bueno al acuerdo entre la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) y los sindicatos sobre el futuro del grupo público naval Izar.

Fuentes del Gobierno anunciaron ayer que se harán gestiones con la presidencia del Ejecutivo comunitario para subrayar que el acuerdo marco firmado el jueves se adecúa a los requerimientos y a la normativa europea. Así lo manifestó Rodríguez Zapatero en Bruselas: "Vamos a seguir los principios jurídicos de la UE".

El vicepresidente español y ministro de Economía, Pedro Solbes, conversó a primera hora de ayer con la comisaria de Competencia, Neelie Kroes, para informarle del acuerdo logrado ayer y anunciarle que recibiría una notificación oficial.

La reacción gubernamental se produjo justo después de que Jonathan Todd, portavoz de Competencia, señalara que la Comisión alberga "ciertas inquietudes" sobre el pacto.

La vicepresidenta María Teresa Fernández de la Vega respondió tras el Consejo de Ministros que el Ejecutivo confiaba en obtener una respuesta positiva de Bruselas. "Estamos tranquilos porque creemos que todo entra en el margen de la legislación europea. No tengan la menor duda de que el acuerdo suscrito ayer el jueves está en el ámbito de la legislación europea, a diferencia de lo que ocurrió en el pasado".

La vicepresidenta se refirió así a la ayudas concedidas por el Gobierno del PP, que fueron declaradas ilegales por la Comisión Europea, lo que obliga a las empresas de Izar a devolverlas.