Si nos lo llegan a contar sólo hace unos meses no hubiésemos creído que Argentina y Brasil iban a convertirse en las mejores plazas bursátiles en lo que va de año. Sólo para situarnos, a finales del año pasado evaluábamos las probabilidades de un impago o reestructuración de la deuda de Brasil, y ahora calculamos que podría llegar a rating de "grado de inversión" en 2004 (de B+ a BBB).

Sin embargo, la zona deberá seguir haciendo frente a importantes retos en los próximos meses que ayudarán a confirmar si este optimismo está justificado. Así, el día 27 de abril, los argentinos acudirán a las urnas para votar a su gobernante.

Tal como adelantan las encuestas, lo más probable es que el próximo presidente argentino sea peronista (no queda claro si será el candidato propuesto por Duhalde, Kirchner, o Menem), pero como ninguno de ellos está consiguiendo ventajas frente al resto seguramente acudirán a la segunda ronda.

Estas elecciones son especialmente importantes porque significan que terminan los días felices para Argentina, ya que para agosto termina el acuerdo con el FMI firmado en enero y hay que comenzar a negociar uno nuevo. Más adelante, el 6 de junio le tocará el turno a Méjico con sus elecciones.

Desde la reforma electoral de 1997 ningún partido ha conseguido la tan deseada mayoría. Buenas noticias serían que el partido del presidente Vicente Fox (en la imagen) la consiguiese pero encuestas recientes apuntan a que gobierno y oposición (PRI) obtendrán un tercio de los votos. Lo suficiente para vetar cualquier reforma de la constitución y entorpecer reformas estructurales.

Por último, y aunque con las elecciones de octubre tuvimos bastante, Brasil también tiene que hacer frente a importantes compromisos políticos: reforma de impuestos y reforma de la Seguridad Social. Este mes es clave para que cristalicen porque Lula tiene que reunirse con los gobernadores de los estados y preparar estos temas de cara a que pasen a aprobarse al Congreso. Con todo esto vemos que son semanas clave para los países latinoamericanos.