El Gobierno catalán está decidido a abortar cualquier intento de politizar las cajas de ahorro catalanas. El presidente de la Generalitat catalana, Pasqual Maragall, lanzó ayer una crítica a los proyectos que en los últimos años "han tratado de politizar" las entidades de ahorros y se mostró partidario de reforzar el actual modelo financiero de las cajas en el acto central del centenario de La Caixa, presidido por el príncipe Felipe.
"El modelo económico de las cajas de ahorros es conveniente para Cataluña porque permite mantener y ganar centros de decisión importantes para el país", dijo. Maragall recordó crisis como la de la caja italiana Cariplo para defender "la independencia" de estas entidades --"por su papel decisivo en el terreno de la prestación de servicios", apuntó-- y reiteró que el Govern "quiere impulsar el modelo actual" con pequeños retoques después de los múltiples cambios legislativos de los últimos años.
Además de Maragall, el príncipe de Asturias subrayó el papel de la entidad de ahorros catalana "en la vida de muchos españoles" y aseguró que las cajas "se han convertido en precursoras del concepto de empresa socialmente responsable", a través de las labores que desarrollan con la obra social.
PERMANENCIA El presidente de La Caixa, Ricard Fornesa, fue el encargado de abrir el acto con un breve repaso de los 100 años de la entidad. Fornesa señaló que el siglo cumplido es "un sello, porque la permanencia significa aceptación, credibilidad y éxito". Reiteró el objetivo de la caja de acercarse más a la sociedad "a través de la Fundación y del hólding social".
