El Ibex 35 terminó en 8.834,1 puntos, con un alza del 2,53%, una sesión de elevada volatilidad, en la que el máximo y el mínimo se distanciaron 300 puntos, y el volumen de contratación fue inferior a los 3.000 millones de euros. La sesión se decantó por las compras cuando en Wall Street los tres principales indicadores repuntaron después de una batería de resultados para todos los gustos; un nuevo comentario positivo del Secretario del Tesoro, Timothy Geithner, sobre la recuperación y, sobre todo, un dato inmobiliario, mucho mejor de lo previsto.

Entre los resultados importantes de la jornada en Estados Unidos se dieron a conocer los de Morgan Stanley, que fueron peores de lo previsto, y los de Boeing, que también decepcionaron. La nota positiva fue para Wells Fargo, McDonalds y AT&T. Al cierre de EEUU presentó sus cuentas Apple.

En Europa, han cumplido el trámite Volkswagen, Electrolux, Nestlé y Heineken, y solo la segunda aportó una nota positiva. Iberdrola presentó unos buenos resultados, pero la suiza Roche reconoció problemas serios con el desarrollo de uno de sus fármacos.

Ante esta avalancha de balances y la falta de referencias macroeconómicas, las bolsas europeas se fueron arriba con Wall Street y cerraron con alzas superiores al punto porcentual en París y Fráncfort. Londres se quedó un poco atrás en las alzas y no alcanzó ese 1%. El Ibex fue el más alcista de toda Europa. Gracias, sobre todo, a Bankinter (7,06%), OHL (6,39%) y Telecinco (5,88%), pero se notaron más los avances del Santander (4,21%) y el BBVA (3,79%). Fuera del selectivo publicaron sus cuentas CAF (2,12%) y Cie Automotive (2,43%), aunque tuvieron mayor repercusión las de NH Hoteles (10,27%).

En otros mercados hubo bastante actividad. El fuerte repunte de los inventarios de petróleo en Estados Unidos impactó en los futuros, que cedieron alrededor de un punto porcentual, hasta los 49 dólares en el Brent y los 48 dólares en el West Texas.