El ministro de Fomento, Francisco Alvarez-Cascos, intentará esta semana, por segunda vez, alcanzar un pacto de Estado sobre el suelo con las comunidades autónomas para combatir el problema del encarecimiento de la vivienda en los últimos años.
Alvarez-Cascos presidirá el próximo miércoles la segunda reunión de la conferencia sectorial, en la que se debatirá la propuesta alternativa presentada por las autonomías gobernadas por los socialistas. La reforma de la Ley del Suelo planteada por el PSOE contradice el espíritu liberalizador del mercado urbanístico en que se basa la presentada por el Ejecutivo.
El texto de los socialistas aboga por aumentar la intervención pública en el campo del urbanismo y modificar el sistema de cálculo de la valoración de los terrenos, de modo que se eliminen todos los elementos de especulación y de aspiración de revalorización futura de los mismos.
En cambio, la propuesta oficial de Fomento pretende acabar con la discrecionalidad de los ayuntamientos a la hora de declarar un determinado suelo no urbanizable.
PREOCUPACION
El secretario de Estado de Infraestructuras, Benigno Blanco, aseguró ayer que "se llegará al pacto sobre el suelo, aunque no sea ese mismo día" (por el miércoles), ya que la vivienda es una de las "preocupaciones sociales más importantes".
