Final feliz. Alberto Cortina y Alberto Alcocer, conocidos como los Albertos, han tenido que esperar casi cuatro años para que el Tribunal Constitucional anule la sentencia del Tribunal Supremo que les condenó a tres años y cuatro meses de prisión por estafa y falsedad en documento mercantil por la venta de Urbanor, propietaria de los terrenos donde se construyeron las Torres KIO de Madrid. El alto tribunal ha establecido que el Supremo se equivocó cuando decidió que los hechos no habían prescrito. La sentencia era esperada con gran interés en medios financieros, ya que los primos estaban pendientes de ingresar en prisión por haber engañado a sus socios con la venta de Urbanor.