Apartir de ahora, Telefónica podrá subir o bajar como desee sus tarifas de telefonía fija y ya no estará sujeta a ninguna limitación por parte del Gobierno. La Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT) aprobó ayer una importante resolución por la que se liberalizan las llamadas desde fijos para particulares y empresas. Esta resolución elimina el sistema de precios regulados de Telefónica, conocido como price cap (precios máximos), vigente desde el 1 de agosto del 2000.

El sistema implantado por el exministro del PP Rodrigo Rato tenía una doble filosofía. De una parte, evitar posibles abusos en los precios del operador dominante. De otra, ayudar a contener la inflación. En los ocho últimos años, los precios de Telefónica han acumulado un descenso del 37%. El epígrafe de comunicaciones del índice de precios de consumo (IPC) acumula una bajada de 13,3 puntos desde el 2000, que contrasta con el aumento de 17,4 puntos del índice general.

10 DIAS DE ADELANTO Para este año, el sistema de price cap imponía una subida nula para la cesta de llamadas fijas de Telefónica. El esquema de tarifas por segundos de la compañía, que entró en vigor el sábado pasado, conjuga descensos en las llamadas metropolitanas, interprovinciales e internacionales, con una ligera subida en el establecimiento de llamada de fijo a móvil. En cuanto se publique la resolución de la CMT en el Boletín Oficial del Estado, en unos 10 días, Telefónica podrá mantener este esquema o cambiarlo. Sólo tendrá que comunicárselo a la CMT con 10 días de adelanto (frente a los 21 de antes).

En la decisión de la CMT subyace la idea de que en el mercado español ya existe suficiente competencia como para que el libre juego de los operadores defina el nivel de precios adecuados. Así, al menos, se interpreta la resolución en Telefónica, donde se recibió con satisfacción la decisión. El regulador aún debe examinar otros precios --como la cuota de abono o el mercado de acceso de terceros-- para decidir si extiende más la liberalización.

CONSECUENCIAS La pregunta es si los precios de Telefónica subirán. "Puede que sí o puede que no. Todo dependerá de la competencia del mercado", responden en la CMT, en el Ministerio de Industria y en Telefónica.

En todo caso, la CMT se ha guardado gran capacidad de control sobre la actividad comercial de Telefónica. El antiguo monopolio "no podrá comercializar ofertas minoristas que impliquen riesgos para la libre competencia". La CMT vigilará que no se ofrezcan "reducciones de precios anticompetitivos". Tampoco podrá incurrir en un "empaquetamiento abusivo o injustificado", que imponga servicios no requeridos o precios abusivos de la oferta. Ni podrá practicar "una discriminación abusiva en términos de precios" en función de la red de destino. Tampoco podrá imponer cláusulas contractuales abusivas, como fidelización o exclusividad.