Telefónica se deshizo finalmente ayer de una de las grandes adquisiciones que se realizaron en la era de Juan Villalonga: la productora de televisión Endemol, propietaria de formatos televisivos de éxito como Gran hermano y Operación triunfo.

El comprador es un consorcio recién constituido con una importante participación del grupo Mediaset, del exprimer ministro italiano Silvio Berlusconi, que se ha hecho con el 99,97% de Endemol Holding, sociedad con la que Telefónica controlaba el 75% de la productora.

La nueva sociedad propietaria está constituida, a partes iguales, por Mediacinco Cartera (compuesta por Mediaset y su filial española Gestevisión Telecinco, dueña de Tele 5), la sociedad de inversiones del cofundador de Endemol, John de Mol, Cyrte, y el fondo GS Capital Partners VI Fund, propiedad del banco de inversiones Goldman Sachs. El consorcio se ha comprometido a lanzar una oferta pública de acciones (OPA) sobre el 25% restante al mismo precio, tan pronto como concluya el proceso de adquisición, que precisa de autorización administrativa.

Mediaset pagará 2.629 millones de euros por la compañía, lo que supone una valoración de 25 euros por acción. Telefónica, que compró la totalidad de la compañía a sus fundadores en el 2000 por acciones equivalentes a 5.500 millones de euros, en el momento del anuncio, asegura que la operación le reportará una plusvalía de 1.400 millones.

La operadora cuenta el valor nominal de la acción, muy inferior al del mercado, y a la bajada del valor desde el momento en que se anunció el trato a su cierre, seis meses después. Telefónica también añade el beneficio que le generó la salida a bolsa del 25% de Endemol, que ha visto triplicar su precio desde noviembre del 2005 hasta ahora.

La operación de compra de Endemol fue objeto de investigación por parte de la Fiscalía Anticorrupción, que buscó posibles comisiones ilegales y ventas fraudulentas de activos.

DIRECTIVOS ESPAÑOLES La oferta de Mediaset ha desbancado a la presentada por De Agostini (accionista de Antena 3 TV), la firma francesa PAI Partners --en la que participaba el presidente de LVMH Bernard Arnault-- y el antiguo responsable de Endemol Francia, Stephane Courbit. Esta candidatura estaba apoyada por los dos directivos españoles de Endemol, Josep Maria Mainat y Toni Cruz, que querían distanciarse de un posible regreso de John de Mol a la compañía que fundó. El magnate holandés ya ha anunciado su intención de no volver a ponerse al frente de la compañía ni de solicitar un puesto en el consejo de administración, aunque sí anticipó su interés por utilizar la compañía para vender nuevos formatos.

Otro comprador era el grupo auspiciado por la firma de capital riesgo estadounidense T.H. Lee, con Apax Partners y dos ejecutivos televisivos estadounidenses como socios.

Con la venta de la productora, Telefónica liquida los restos de su negocio audiovisual que impulso Juan Villalonga y que llegó a concentrar hace cinco años la plataforma de satélite Via Digital, una importante participación en Antena 3 TV (hasta el 60%) y Endemol, la productora estrella española gracias a la absorción de Gestmusic y Zeppelin.

AUDIOVISUAL Con la llegada de César Alierta al frente de la empresa, Telefónica comenzó a deshacerse de aquellas participaciones que no fueran estratégicas para su negocio de voz y datos, sobre todo las relacionadas con la producción audiovisual. Llegó así la unificación de las plataformas televisivas digitales de pago y la venta de la participación en Antena 3 a Planeta.