Las empresas Philip Morris, Altadis y Japan Tobacco International (JTI) empezaron el sábado a aplicar una subida de entre 10 y 25 céntimos de euro en el precio de diversas marcas de cigarrillos. La multinacional estadounidense Philip Morris ha encarecido 20 céntimos la cajetilla de su emblemática Marlboro, hasta establecerla en 2,95 euros, y subirá en la misma proporción el precio de LM, Chesterfield y Next, que se sitúan en 2,45, 2,60 y 2,30 euros, respectivamente.

Altadis también ha subido 0,20 céntimos el precio de Fortuna, Nobel y Habanos, estableciéndolo en 2,40 euros en el caso de las dos primeras marcas, y en 2,70 euros en el caso de la tercera, mientras que Ducados Rubio se venderá a 2,20 euros, lo que supone 10 céntimos más. De igual forma, Japan Tobacco International ha situado la cajetilla de Winston en 2,40 euros, 20 céntimos más, mientras que la de Camel sube en igual cuantía y se queda en 2,60 euros. Por su parte, Gold Coast costará 10 céntimos más (2,20 euros).

Expertos consultados por Europa Press destacaron lo insólito de un movimiento comercial simultáneo y similar por parte de las tres multinacionales, ya que en anteriores ocasiones las subidas de precio se realizaron de forma independiente y escalonada. Estas alzas de precio reflejan los efectos de las medidas fiscales adoptadas por el Gobierno para atajar la proliferación de las marcas baratas a las que recurrieron las tabacaleras en su guerra de precios para afrontar la ley antitabaco.

Concretamente, el Congreso convalidó en noviembre la última subida de impuestos a las labores del tabaco con el objetivo de que las tabacaleras la trasladaran al precio de sus cigarrillos, como fórmula de avanzar en su lucha contra el tabaquismo. La norma provocó poco después una reacción en cadena de las tabacaleras que, lideradas por Altadis, optaron por trasladar el endurecimiento tributario a los precios de sus marcas.