Los malos datos macroeconómicos en EEUU dieron argumentos pesimistas a Wall Street, y con el descenso del mercado neoyorquino, las bolsas europeas se fueron a la baja con pérdidas cercanas al 2%. Todos los índices terminaron en negativo. También el Ibex 35, que retrocedió el 1,8%, hasta los 13.073 puntos. Sin embargo, la semana cerró con un saldo positivo del 1,07%. Algo poco habitual en lo que llevamos de año.

La renta variable se movió con cautela en las primeras horas de negociación. Pero sucumbió a mediodía ante los malos resultados del banco francés Natixis --se desplomó el 12% por el peso en sus cuentas de activos subprime-- y ante el aviso de UBS, que ha advertido que las pérdidas por el efecto de las hipotecas basura pueden ser del doble de lo anunciado (120.000 millones de dólares).

El vencimiento de opciones y futuros puso el resto, ya que los inversores habían apostado por nuevas caídas en los futuros y habían tomado posiciones cortas. Por si fuera poco, los malos datos macroeconómicos procedentes de EEUU --el aumento del índice de precios de importación, la caída de la encuesta manufacturera y el descenso de la confianza del consumidor a mínimos de los últimos 16 años-- aceleraron la salida de papel en las bolsas europeas. El recorte de previsiones de beneficios para el 2008 de la firma Best Buy, la mayor cadena de electrodomésticos de EEUU, terminó por componer un panorama poco incentivador para los inversores.

En la renta variable española destacó Inmobiliaria Colonial (+8,14%), que fue la mejor, gracias a la posible oferta del fondo de Dubai que ha demostrado su interés por entrar en el capital. La banca fue, otra jornada más, la gran perjudicada con recortes tanto para la banca mediana como la grande. Bankinter cedió el 3,95%, seguido de cerca por el Banco Popular (-3,1%), BBVA y Banesto (-2,39%) y Santander (-2,35%). El Banc Sabadell fue el menos perjudicado, si bien se dejó el 1,15%.