Durante su estancia en Cáceres, Gaspar Llamazares pidió a Rodríguez Zapatero que presente propuestas de futuro y "no entre al trapo" de las críticas que le lanza Rajoy sobre la ilegalización de ANV o el truncado proceso de paz con ETA. Le recordó, también, que el cambio político de marzo del 2004 se produjo gracias a la movilización de la izquierda contra la guerra de Irak, el Prestige o el "decretazo", y reprochó que el Gobierno sólo haya respondido a este movimiento de izquierdas con "reformas puntuales" y "viviendo de las rentas de Irak".
El líder de IU lamentó que el Gobierno socialista esté "instalado" en la política económica heredada del PP, mientras que en política Exterior y de Defensa se encuentre dividido "entre el corazón y la cabeza", con una estrategia que "deja mucho que desear" y "condenado" a los intereses de EEUU y la OTAN. Y abogó por poner en marcha una verdadera "regeneración democrática" que contemple la reforma de la Constitución y del sistema electoral para detener a una derecha que trata de imponer una "globalización ultraliberal y de guerra".
