El presidente del Ejecutivo balear, Francesc Antich, se está arremangando para quitar hasta la última mancha de corrupción de su mandato. La portavoz del Gobierno, Joana Barceló, anunció ayer que las consejerías de Turismo, Medio Ambiente, y Juventud y Deportes, gestionadas hasta el pasado viernes por UM, serán auditadas para "clarificar" la gestión realizada en estos departamentos y rendir "cuentas" ante los ciudadanos, una acción que estará enmarcada dentro del "compromiso de transparencia" suscrito por los socialistas. Antich ha aprovechado la expulsión de sus socios para reducir consejerías y eliminar un 20% de empresas públicas.

La reestructuración del Gobierno balear se ha basado en la supresión de las consejerías de Medio Ambiente y Juventud y Deportes, que pasan a formar parte de otros departamentos ya existentes. Así pues, el Bloc per Mallorca gestionará Medio Ambiente, que se integra en la consejería de Movilidad y Ordenación del Territorio, y Juventud, que se une a la de Asuntos Sociales. Los socialistas se encargarán de Deportes, que queda integrada en Presidencia, y Turismo, cuya responsable pasará a ser Barceló, que hasta ahora se hacía cargo de Trabajo y Formación. Pere Aguiló será el nuevo consejero de esta área. Ambos tomarán posesión de sus cargos hoy mismo.

SUPRESION DE EMPRESAS La reorganización incluye reducir una quinta parte de las empresas públicas, entre ellas el Instituto de Estrategia Turística (Inestur), implicado en la trama de corrupción. También se prevé la supresión del 50% de los cargos de las consejerías que UM dejó vacantes tras las detenciones.

El juez decretó el sábado prisión bajo fianza por riesgo de fuga para los expresidentes de UM Miquel Nadal y Miquel Angel Flaquer; el exgerente del Inestur y el exdirector de Promoción Turística.