El obispo de Bilbao y presidente de la Conferencia Episcopal Española (CEE), Ricardo Blázquez, pidió ayer a ETA que deponga las armas y deje de matar. Al mismo tiempo, animó a la banda terrorista a pedir perdón y a las víctimas de su violencia a perdonar "para que se pueda llegar a una reconciliación más profunda". El prelado también recordó el ofrecimiento del episcopado a contribuir a lo que llamó la "gran tarea de la pacificación" del País Vasco.