El secretario general de ERC, Josep Lluís Carod-Rovira, afirma en una entrevista que publica hoy El Periódico de Catalunya que no se retirará de la política pese a la presión por la crisis que ha desencadenado su encuentro con ETA. En este sentido, subraya: "Lo que están esperando algunos es mi retirada. Y eso no lo conseguirán ni el PP ni ETA". Y añade: "Si el franquismo no consiguió retirarme, no lo va a conseguir nadie ahora. Ni deserto, ni renuncio, ni me descorazono. Cada vez estoy más convencido de mis ideas".

El dirigente recuerda que ya reconoció que cometió un "error institucional", pero subraya que actuó de acuerdo con sus convicciones. Respecto a los mensajes del PP alertando de la radicalización de ERC, Carod califica de "imposible" esa posibilidad y asegura que su partido "no se radicalizará". "Eso es lo que querrían nuestros adversarios" destaca.

Carod dice que ha sufrido "un linchamiento como no se había visto desde 1977". "Si lo he podido resistir es porque he tenido el apoyo de mi familia, de mi partido y del ciudadano que me aborda por la calle". Califica de "falso" que la policía le propusiera que contara los detalles de la reunión con ETA, y atribuye el rumor a la "institucionalización de la mentira" que, a su juicio, vive el país. También niega la existencia de pruebas gráficas o documentales de la entrevista que mantuvo con los etarras.

Asimismo, el líder de ERC elude confirmar si el contacto con ETA se produjo en Perpiñán. "Nunca he dicho dónde estuve", insiste, para apuntar que la reunión duró menos de seis horas y en ella explicó "qué piensa ERC".