La supuesta activista de ETA Intza Oxandabarts ha sido condenada hoy a dos años de cárcel exentos de cumplimiento por el Tribunal de Apelación de París.

Oxandabarts, originaria de la localidad vascofrancesa de Gamarte, había sido condenada el 14 de junio de 2006 en primera instancia a dos años de prisión, pero entonces uno de ellos era de firme cumplimiento.

Tanto entonces como ahora, la Justicia francesa considera que Otxandabarts es culpable del delito de asociación de malhechores con fines terroristas por complicidad en falsificación de documentos administrativos.

Su fotografía apareció en cuatro documentos de identidad franceses falsificados, hallados en un piso en Tarbes (suroeste de Francia) en el que residía a finales de 2002 el que entonces fuera el supuesto jefe militar de ETA, Ibón Fernández de Iradi, "Susper", que era también el responsable del aparato de reclutamiento de la banda terrorista.

En primera instancia, Oxandabarats fue juzgada y condenada junto a otros seis supuestos activistas de ETA que también habían sido detenidos en 2002 tras el primer arresto de "Susper".

Se trataba de los españoles Balbino Saenz de Olarra, Jesús Guinea Sagasti, José María Otegi Arrugaeta, Naia Zurriarrain Mendiguren, Iker Heredia de Elu y Joana Núñez Benito, que habían sido detenidos el mismo día que "Susper", el 19 de diciembre de 2002, y que fueron condenados a penas de entre seis y diez años de cárcel, así como a la prohibición definitiva de estancia en Francia.

Sólo la vasco-francesa Intza Oxandabarats recurrió su sentencia en primera instancia. En la audiencia del pasado 25 de abril ante el Tribunal de Apelación, la Fiscalía había pedido a la Corte la confirmación de la condena dictada en primera instancia contra Otxandabarts, mientras que la defensa había pedido la absolución.

La abogada Yolanda Molina había denunciado, entre otras cosas, el tiempo transcurrido entre la detención de su cliente, en diciembre de 2002, y la celebración del primer juicio, en mayo de 2005.

Cuando fue detenida, Otxandabarts formaba parte de la organización juvenil radical vasca Segi. Ilegalizada en España, Segi, que se llamaba anteriormente Haika, surgió de la fusión en 2000 de la organización juvenil vascofrancesa Gasteriak y el movimiento vasco-español Jarrai.