Francisco Bravo y su tío Francisco Vázquez, los constructores a los que el PSOE acusa de haber sobornado a dos diputados en la Asamblea de Madrid, son militantes del PP. La formación conservadora les pidió ayer la "baja voluntaria" tras la publicación de numerosas informaciones que colocan a ambos promotores en el centro de una trama de corrupción política de alcances todavía impredecibles.

La alcaldesa y presidenta del PP de Villaviciosa de Odón, Nieves García, afirmó ayer que solicitó la baja a los dos afiliados para impedir que "el buen nombre de este pueblo se vea perjudicado por maniobras internas que no afectan a este partido y que son fruto de candidaturas erróneamente confeccionadas" por el PSOE.

AFILIACION MASIVA

Se da la circunstancia de que los dos constructores y otros 78 familiares y amigos se afiliaron masivamente al PP de Villaviciosa de Odón en vísperas de un congreso local del partido. Sus votos contribuyeron a que Nieves García desbancara de la presidencia a la favorita, Pilar Martínez, que se quejó de la maniobra, sin éxito, ante la dirección madrileña del partido.

Un portavoz de la dirección nacional del PP explicó que, en el caso de los dos promotores, se ha decidido pedirles la baja voluntaria en lugar de abrirles expediente de expulsión, porque esto último "supondría reconocer que han hecho algo irregular, y de ello no hay constancia", aseguró.