Tayser Alony, corresponsal de la cadena de televisión qatarí Al Jazira, aseguró ayer que Osama bin Laden le concedió una entrevista un mes y medio después de los atentados del 11-S porque era el único periodista extranjero que estaba en Afganistán después de que empezara la guerra. "Ni me favoreció ni me privilegió", aseguró. El fiscal le imputa un delito de pertenencia a banda armada y le reclama nueve años de cárcel.

Alony se presentó ante el tribunal como un hombre culto que después de dedicarse a diversos negocios en Granada acabó en Al Jazira, donde montó una corresponsalía en Afganistán cuando el Gobierno talibán concedió una licencia para una televisión árabe. Por ello, llegó a Kabul en el 2000. Desde el primer momento, su objetivo fue entrevistar al terrorista más buscado, que se había refugiado en ese país tras ser expulsado de Sudán.

El periodista contó que solicitó la entrevista con el líder de Al Qaeda al Ministerio de Asuntos Exteriores, pero esa petición no prosperó. El encuentro fue posible después de que un emisario de Bin Laden se pusiera en contacto con él a mediados de octubre del 2001.

CNN, "CADENA ALIADA" En ese encuentro, el emisario le exigió un cuestionario previo. El periodista, según su versión, rechazó esa condición, que fue finalmente aceptada por los directivos de la cadena, que también decidieron ceder a la CNN --"la cadena aliada", dijo-- la entrevista, que Bin Laden quería hacer en inglés. La cadena norteamericana también mandó un cuestionario con seis preguntas.

El 20 de octubre del 2001 se presentaron en la puerta de su oficina unas personas que, tras cachearle y vendarle los ojos, le condujeron hasta Bin Laden después de conducir durante "dos o tres horas". El jefe de Al Qaeda se interesó por las condiciones de su traslado y le recibió con una cámara para hacer la entrevista.

El terrorista, según su versión, se negó a contestar a preguntas sobre la situación política y sólo aceptó responder sobre cuestiones ideológicas. Alony discutió esas condiciones, pero finalmente realizó la entrevista que fue emitida por la cadena CNN, ya que Al Qaeda la vetó. "Los jefes pensaron que no era profesional porque parecía que trabajábamos para él".

Alony admitió que conocía a Iman Eddin Barakat Abú Dahdah , el jefe de la red en la que están procesadas 24 personas, aunque negó que su relación "fuera fluida". También reconoció que entregó en Afganistán 4.000 dólares a Mohamed Baihaiah, un correo de Al Qaeda, porque era dinero de su familia.