La secretaria general del PP y presidenta regional del partido en Castilla-La Mancha, María Dolores Cospedal, considera que el ministro de Trabajo, Celestino Corbacho, del que parece que "puede prescindir" el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, "ha dejado a España con un nivel de parados que lamentablemente es récord histórico en la historia de la democracia española".

"Si el señor Corbacho va a volver a Cataluña para ser candidato en las elecciones catalanas, lo que tiene que hacer Zapatero es ocuparse de aquellos que quieren trabajar en nuestro país y los españoles estamos menos interesados en líos internos o estamos más interesados en que el Gobierno gobierne y en que el Gobierno ofrezca soluciones que es lo que se espera hoy de un Gobierno que gobierna un país en crisis económica como es el nuestro", ha señalado Cospedal en Guadalajara sobre el anuncio de la salida del Gobierno del titular de Trabajo para concurrir en las listas del PSC en los comicios catalanes de otoño.

La secretaria general del PP ha acusado al presidente del Gobierno y al PSOE de "dejar abandonados a los españoles a su suerte" y ha señalado que "no nos merecemos que nos abandonen mientras ellos se ocupan de sus temas internos decidiendo quiénes van a ser o no van a ser candidatos y diciéndole a los españoles que ellos son los que tienen que emplearse en buscar trabajo y que ellos son los que tienen que intentar solucionarlo porque así habrá menos parados".

EL PSOE DEFIENDE LA LABOR DEL MINISTRO

Por su parte el portavoz del Grupo Socialista en el Congreso de los Diputados, José Antonio Alonso, ha definido a Celestino Corbacho como un "buen ministro" al que le ha tocado "lidiar con una época muy mala". Alonso ha subrayado, en rueda de prensa en la Cámara Baja, que Corbacho ha hecho "todo lo que ha podido" para frenar el aumento del desempleo, al tiempo que ha asumido la "responsabilidad" de la reforma laboral que está pendiente de aprobación en el Congreso.

Además, el portavoz socialista ha remarcado que "nadie debería sorprenderse" de que el ministro quiera "volver a su tierra" para incorporarse a las listas del PSC en las próximas elecciones catalanas y "ayudar" al presidente de la Generalitat, José Montilla.

Por ello, ha censurado las críticas vertidas a lo largo de esta mañana después de que se haya conocido su futura dimisión, y las ha considerado una "falta de respeto" a su labor. En su lugar, ha añadido, los populares deberían explicar las acusaciones de corrupción en la Comunidad Valenciana y "anteponer los intereses del país a los partidistas".