El presidente de la Ejecutiva guipuzcoana del PNV, Joseba Egibar, defendió la celebración de una consulta sobre el futuro político de Euskadi porque podría ser "una línea de desbloqueo" de la actual situación política. Recordó que el tripartito vasco se comprometió a realizarla antes del fin de la presente legislatura, y descartó que la persistencia de la violencia sea un obstáculo, "porque no se puede permitir que ETA maneje el interruptor democrático".

En una entrevista concedida a Europa Press, Egibar defendió que para la validez de la consulta que propugna el lendakari, Juan José Ibarretxe, bastaría la mayoría absoluta de los votos válidos emitidos, aunque admitió que sería preciso marcar un determinado nivel de participación. El dirigente nacionalista encabeza el sector opuesto al actual presidente del PNV, Josu Jon Imaz, poco proclive a cumplir este compromiso. Egibar afirmó que la pregunta concreta a someter a referendo debe quedar en manos del lendakari, aunque recordó que los socios del PNV en el tripartito, EA y EB-IU, también deben poder decidir.

Egibar adelantó que el Parlamento vasco determinará en septiembre si la consulta debe celebrarse pese a la persistencia del terrorismo, ya que el lendakari siempre ha marcado como condición la ausencia de violencia.

El expresidente del PNV, Xabier Arzalluz, por su parte, en una entrevista a El País , se mostró también favorable a la consulta y reconoció que no está de acuerdo en "cómo se están haciendo las cosas" en su partido. Al igual que Egibar, demostró su apoyo a Ibarretxe y aseguró que la mayoría del PNV respalda sus tesis frente a las de Imaz.