El presidente aprovechó ayer para transmitir un mensaje de tranquilidad a la Diputación foral de Alava. Esta institución, gobernada por el PP, ya ha dicho que se acogerá a los derechos forales para decidir su "futuro político si se rompe el pacto constitucional y estatutario". Zapatero insistió en que se trata sólo de una propuesta.