Las tropas españolas en el Líbano se reforzarán en los próximos días con 88 militares, que partieron ayer del puerto de Cartagena (Murcia) a bordo de la patrullera Cazadora para incorporarse a la fuerza marítima de la misión internacional de Naciones Unidas en la zona. Los soldados pertenecen en su mayoría al Mando Naval de Canarias y su objetivo será ayudar al Gobierno del Líbano a mantener el control de la frontera marítima. Fundamentalmente, se pretende impedir que la guerrilla Hizbulá reciba armas a través de esta vía.

Hasta ahora España solo participaba en la misión terrestre con un contingente máximo de 1.100 soldados. De hecho, Defensa deberá replegar unos 80 militares para no rebasar el límite autoimpuesto por el Gobierno de Zapatero.