ETA busca "alejar o dificultar" las inversiones internacionales en España y afirma que "las multinacionales serán objetivo". Además, se plantea extender la petición del impuesto revolucionario y reitera su intención de atentar contra cargos del PP y PSOE.Pero la banda añade que también la gente que ha integrado sus listas en las pasadas elecciones, aunque no hayan sido elegidos, pueden ser potenciales víctimas de sus atentados. En el boletín interno Zutabe 100, la banda armada se propone "reforzar el frente económico" y manifiesta que el "verdadero daño" se realiza mediante "campañas armadas firmes y sistemáticas". "El efecto no será inmediato, sino una consecuencia de un ataque diversificado, permanente y calculado".Además, dice que el turismo será otro de sus objetivos, teniendo en cuenta la "importancia" que tiene en la economía española. ETA señala que "oligarcas, ricos, banqueros y responsables económicos" serán objeto de ataques en sus domicilios, así como en los lugares que frecuentan en su tiempo libre. La organización terrorista cree que "hay que generalizar también a estos la petición de subvenciones en favor de la lucha", en referencia a la petición del denominado impuesto revolucionario. Se analizará llevar a cabo acciones parecidas en España. Asimismo, destaca que "se pedirá que sean efectivas en la construcción de Euskal Herria" a las empresas que han tenido una especie de Euskal label.Hace extensivas estas medidas las asociaciones del colectivo empresarial y a las ETTs, por su "responsabilidad que en la precarización del trabajo" y señala que se incluirá a sus responsables entre los empresarios a los que se pida dinero. ETA precisa que será en el Estado español donde se realice la mayoría de las acciones terroristas, mientras que "en Euskal Herria sólo se llevarán a cabo en casos concretos y contra objetivos concretos". Contra el Partido Popular y el PSOEEl boletín interno señala que "se ha multiplicado el ataque contra la izquierda abertzale y sus instituciones", por lo que considera que se debe "dar una respuesta al ataque fascista de los mandatarios y poderes españoles". Por ello, amenaza "todos los responsables políticos y electos del PP", al igual que los del PSOE, UPN o UA, aunque precisa que si observan una "actitud positiva" de alguno de sus miembros "en torno a la superación de la situación de opresión de Euskal Herria", podrá cambiar de postura contra él, siempre que "esa actitud es clara y notoria para ETA". Incluye entre sus objetivos a aquellas personas que han completado listas socialistas o populares, aunque "no sean electos" y residan fuera de Euskadi. Critica a la autonomíaETA arremete, de nuevo, contra el marco autonómico "impuesto por el Estado español" y manifiesta que "decidirá, en cada momento, la forma de actuar para hacer frente a las actuaciones concretas contra la construcción nacional" que, en su opinión, se dan en la Comunidad Autónoma Vasca y en Navarra. En concreto, nombra "la línea que los mandatarios navarros llevan contra el euskera, la línea contra el euskera de Osakidetza y otras asociaciones y la línea que EiTB lleva contra la lucha por la liberación de Euskal Herria, a través de la manipulación, intoxicación, desinformación y censura".