Al PP se le escurre la Xunta de Galicia entre los dedos y por eso recurre a "la campaña del miedo, a lo Bush", blandiendo "peligros externos" que nada tienen que ver con el sentir de los gallegos. Los socialistas de Emilio Pérez Touriño han llegado a esta conclusión encuestas en mano y tras comprobar la dureza con la que Manuel Fraga ha inaugurado la campaña gallega. El viernes, en su primer mitin, el candidato del PP lanzó un mensaje apocalíptico: la coalición de PSG y BNG traería a "ETA entera a Galicia".

"Se empieza hablando de nacionalismo y se acaba como en el País Vasco", o creando organizaciones "como el Ejército Guerrillero Gallego", dijo Fraga en su arranque, en el que recordó que este grupo atentó hace años contra su chalé con una bomba.

No fue su única embestida. En un encuentro con jóvenes, Fraga lanzó una enérgica apelación a evitar que el 19-J salgan victoriosos los que quieren destruir, según él, la familia. Les invitó a votar al PP para acabar con "determinadas leyes asquerosas", como la que permite el matrimonio homosexual o el divorcio en seis meses sin alegar causa.

El candidato del PSG, Emilio Pérez Touriño, hizo ayer oídos sordos y evitó contestar a las arremetidas de Fraga. El PSG sabe que el 19-J es su gran oportunidad para poner fin a los 15 años de Gobierno del PP y sus asesores han decidido que su candidato no se desvíe un ápice del guión marcado. Un guión que pasa por demostrar que hay una propuesta para Galicia alternativa al "proyecto agotado" del PP. En Santiago, Touriño presentó los diez ejes básicos de su programa.

SONDEOS En el PP cunde el nerviosismo por el resultado del 19-J y los sondeos no ayudan a apacigüarlo. El último lo publicó ayer La Voz de Galicia . El trabajo vaticina que el PP se quedará con 36 diputados, a dos de la mayoría absoluta que necesita para gobernar. El PSG sube de 17 a 24, y el BNG baja de 17 a 15.