Francia entregará hoy al presunto jefe del aparato militar de ETA hasta su arresto en noviembre pasado, Garikoitz Aspiazu, Txeroki , para que hasta el sábado la Audiencia Nacional pueda avanzar en la instrucción de cinco casos que tiene abiertos contra él.
Esta entrega a España durante seis días constituye una novedad, en la medida en que en Francia está lejos de haber terminado la instrucción contra Txeroki por los hechos que tiene pendientes en Francia, donde en cualquier caso ya fue condenado en octubre del año pasado, pocas semanas antes de su arresto.
El Tribunal de lo Criminal de París le impuso entonces 5 años de cárcel, una sentencia dictada contra él en rebeldía en un proceso al aparato de reserva de ETA en el que fueron condenados en total 18 integrantes de la banda.
Aspiazu no se ha opuesto a esa sentencia --a diferencia de otros dos etarras condenados también entonces en rebeldía, que volverán a ser juzgados en noviembre-- por lo que los citados cinco años de cárcel son firmes.
El que ha sido considerado como jefe de los comandos de ETA fue capturado el 17 de noviembre pasado junto a Leire López Zurutuza en una casa de la localidad de Cauterets, en los Pirineos franceses.
La jueza instructora de París Laurence Le Vert lo imputó cuatro días después como dirigente de la organización terrorista y también por asociación de malhechores con fines terroristas, en relación con el asesinato, en diciembre del 2007, de dos guardias civiles en Cap Breton (suroeste de Francia). Le Vert igualmente le procesó por otros cargos, pero al final no por el de asesinato de los dos agentes.
De la investigación de ese atentado se han conocido nuevos elementos, como la presencia de huellas y de ADN de Txeroki en un coche utilizado para huir por el comando que disparó contra los dos agentes, así como las declaraciones de dos supuestos miembros del comando Nafarroa , detenidos en España, que han vinculado al antiguo jefe militar de ETA con esa acción.
OPERACION CLAVE El arresto de Aspiazu había sido la operación más importante contra ETA en Francia desde que el 20 de mayo del 2008 se detuvo en un apartamento de Burdeos a Francisco Javier López Peña, considerado el número uno de ETA, junto a los presuntos etarras Ainhoa Ozaeta Mendikute, Igor Suberbiola y Jon Salaberria.
De acuerdo con la policía española, a Aspiazu lo había sustituido al frente del aparato militar Aitzol Iriondo, quien apenas estuvo en ese puesto poco más de dos semanas, ya que fue a su vez arrestado, también en Francia, el 8 de diciembre. Siempre según fuentes antiterroristas españolas, el relevo de Iriondo lo tomó Jurden Martutegi, capturado igualmente en el sur de Francia el pasado mes de abril.
