El futuro presidente español, José Luis Rodríguez Zapatero, reconoció ante el canciller alemán Gerhard Schröder que España ha entrado en una nueva fase económica y que no es tan pobre como cuando ingresó en la UE, razón por la que no puede seguir aspirando a ser subvencionada como hasta ahora. Zapatero y Schröder abordaron uno de los temas más espinosos entre España y Alemania en el marco de la UE: las ayudas comunitarias. El líder socialista pretende que las ayudas permitan a España concentrar sus esfuerzos en los temas donde los índices europeos son superiores, como la ciencia, tecnología o educación.