Al juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón no le consta que los policías españoles que viajaron a la base estadounidense de Guantánamo durante el Gobierno de José María Aznar hicieran nada ilegal y estima que realizaron esta visita "con la autorización del Ministerio de Interior para cumplir una actividad de inteligencia".

Esta es la versión difundida ayer por el periodista Luis del Olmo en su programa de radio y que atribuyó al entorno de Garzón. Según esto, el juez, como consta en el sumario, llamó a los agentes para que le informasen de lo que habían visto en Guantánamo. Tras recordar que los policías hablaron con los presos "por voluntad de estos", Garzón considera que solo habrían "cometido un delito" si "les hubiesen coaccionado o torturado para que hablaran o si se hubiesen utilizado las declaraciones en su contra".