La Administración española ha solicitado al armador del buque holandés "Ostedijk" un "plan de actuación" respecto al barco, que permanece a unas 13 millas al noreste de la ría de Viveiro con parte de su carga -unas 6.000 toneladas de fertilizantes- en proceso de descomposición. La directora de la Sociedad Estatal de Salvamento Marítimo (Sasemar), del Ministerio de Fomento, Pilar Tejo, informó hoy en rueda de prensa de que el armador debe presentar "antes de las 22.00 horas" este informe, aunque será la autoridad marítima la que decida las medidas a tomar. Mientras tanto, continúa el vertido "intermitente" de agua desde el buque "Alonso de Chaves" sobre la bodega número dos, donde se encuentra la carga afectada, con el fin de enfriar la zona y tratar de que se detenga el proceso de descomposición. De momento no se ha conseguido "ningún resultado apreciable" sobre la emanación de gases, informó Tejo, quien puntualizó que "según la física" el agua contribuirá a enfriar el área. El Gabinete de crisis creado por el Ejecutivo requirió el plan de actuación al armador ante la ausencia del capitán del buque, que solicitó su evacuación al sentirse "indispuesto". El responsable del "Ostedijk" había sido trasladado esta tarde al buque de salvamento "Don Inda" junto a los otros siete tripulantes que permanecían en el carguero, después de que ayer cuatro compañeros solicitasen su evacuación por problemas respiratorios. Tejo informó de que el capitán presentaba "aparentemente los mismos síntomas" que estos otros cuatro tripulantes, por los que ha sido tratado en el Hospital da Costa de Burela (Lugo). Ante la ausencia del capitán, y pese a que el primer oficial del "Ostedijk" ha tomado el mando, los siete tripulantes que permanecen en el "Don Inda" están a la espera de que llegue hasta allí un representante del armador, para planificar las operaciones. Al mismo tiempo, técnicos de la compañía noruega Yara, fabricante de los fertilizantes del "Ostedijk", asesoran ya, junto a representantes de Fertiberia, a la Administración española sobre las medidas a decidir. La intención es trasladar el buque hasta unas cinco o seis millas de la costa, en una "zona de abrigo", cuando la tripulación regrese para poder abrir las escotillas y enfriar la carga con mayor rapidez. La directora de Sasemar aseguró que sólo existe emanación de gases en una bodega, mientras que la otra permanece "intacta", por lo que apuntó que, una vez que finalice la descomposición, el resto de la carga podría ser descargada donde decida el armador. Tejo no se atrevió a concretar el tiempo que podría permanecer en aguas gallegas el buque "Ostedijk", que iba con destino a Valencia, consideró que la Generalitat "está en su derecho" a decir que no quiere que el mercante atraque en su costa. Por último, descartó que exista una "combustión latente" de los fertilizantes, tal y como apuntó Greenpeace, y subrayó que la "descomposición auto-sostenida" de la carga es "una realidad y no una tesis", confirmada por expertos y por los fabricantes del producto.