Si lo que perseguía el eurodiputado del PP Jaime Mayor Oreja con su afirmación de que el Gobierno sigue negociando con ETA era abrir un debate que perdurara, lo está consiguiendo. Ayer, su versión fue secundada por otro dirigente popular, otro hombre de la era de José María Aznar, Juan Cotino, vicepresidente tercero de la Comunidad de Valencia y director general de la Policía cuando gobernaba el PP. Cotino secundó a Mayor en una tertulia de Radio 9 en la que contestó afirmativamente cuando se le preguntó si existía una nueva negociación con los terroristas, y lo explicó aludiendo a Karl Marx: "Hay un principio que nace del marxismo, que es que el fin justifica los medios, y el planteamiento para algunos es que el fin de ETA justifica cualquier medio, y si ese medio es negociar, negocian".

Cotino, como Mayor Oreja, no aportó pruebas, pero el tema está abierto. Y el PP no hace esfuerzos por cerrarlo. Empezando por su líder, Mariano Rajoy, que ayer optó por no cerrar ninguna puerta y dejar una sospecha en el aire: "El Gobierno ha dicho que no va a negociar, y yo lo apoyaré mientras no tenga la convicción de que haya empezado a negociar. Y espero que no lo haga nunca". Una construcción compleja que responde a la complejidad de la posición de Rajoy: ni desmiente a sus dirigentes ni acusa al Gobierno. Disfruta del ambiente creado.

Y por si no estuviera el PP para animar el debate, llegaron los mediadores internacionales. Entre ellos, el expresidente surafricano Frederick de Klerk, el arzobispo Desmond Tutu, la Fundación Nelson Mandela y tres exprimeros ministros irlandeses. El colectivo, especializado en procesos de paz y resolución de conflictos, elogió ayer la decisión de la izquierda aberzale de recurrir "exclusivamente a medios políticos y democráticos".

Una decisión recogida en una declaración que se conoció el pasado 16 febrero. Un texto, cabe recordar, que fue recibido con total incredulidad por la práctica totalidad de los partidos políticos españoles y que no ha sido tenido en cuenta por estos. En cambio, los mediadores, que se expresaron mediante una declaración leída en el Parlamento Europeo por uno de ellos, Brian Currin, sí creen en esta actitud. Por ello pidieron a ETA que apoye el compromiso y declare un alto el fuego, que sería "plenamente supervisado". Si la banda da ese paso, los mediadores creen que el Gobierno podría iniciar otro proceso de paz.