Pedro Sánchez ha lanzado una contundente oferta a Patxi Lópezeste viernes al mediodía. Desde Alcalá de los Gazules (Cádiz), donde ha protagonizado un breve acto de campaña, el exsecretario general ha pedido al diputado vasco que se retire y se una a su candidaturapara liderar el PSOE. En una batalla tan polarizada como la de las primarias socialistas, que culminarán con la votación el próximo 21 de mayo de los 187.949 afiliados del partido, el exlendakari se está quedando sin espacio frente a Susana Díaz y el propio Sánchez. El exlíder, cuyo empuje entre las bases está sorprendiendo a defensores y adversarios, busca desequilibrar una batalla que se presenta reñida dentro de un PSOE roto en dos.
Pero López ha rechazado dar un paso atrás e integrarse junto a Sánchez. "No es nuestro plan", ha señalado uno de los principales colaboradores del diputado vasco, insistiendo en que irá "hasta el final". Según el equipo del exlendakari, Sánchez ni siquiera se ha dirigido a ellos, limitándose a tender la mano en un acto público. "Actúa como Podemos", han argumentado en esta candidatura, en referencia a las ofertas del partido de Pablo Iglesias para conformar un Gobierno de coalición, el año pasado, y aliarse en una moción de censura para echar al PP del Ejecutivo, la semana pasada.
UNIDOS FRENTE A LA ABSTENCIÓN
"Aquellos que creemos que la abstención fue un error debemoscompartir camino para hacer del PSOE un partido de izquierdas, creíble, coherente y abierto a la participación de la militancia. Quierotender la mano a Patxi López. Sería un orgullo contar con él en nuestro proyecto", ha dicho Sánchez en Alcalá de los Gazules.
Los votos de López, que como Sánchez estuvo en contra de laabstención ante el PP pero a diferencia de él mantuvo su escaño en el Congreso y acató la polémica decisión, pueden ser determinantesen las primarias. La oferta de Sánchez pretende, en este sentido, apelar al voto útil, subrayando a todos los contrarios a Díaz que él es el único que puede derrotarla.
La recogida de avales, que finalizó este jueves, mostró lo igualados que están Díaz y Sánchez. La primera, que cuenta con el apoyo de los aparatos más relevantes, reunió 63.610 firmas de respaldo. Fue todo un récord, y con él parecía que la andaluza iba a arrasar, pero poco después el equipo del líder entregó 57.369, solo 6.000 menos que su rival. López obtuvo cerca de 12.000, suficientes para pasar el corte y ser candidato oficial al liderazgo socialista, pero por muy poco. Se necesitaban 9.368, el 5% del censo.
El reparto de avales provocó la euforia entre los partidarios de Sánchez. "Hay quien está contento por ser segundo. Ya es la segunda vez que lo está. Pero a mí me gusta más ser primera", ha señalado Díaz en Eivissa, en referencia a los escaños conseguidos por Sánchez en las dos últimas elecciones generales, 90 primero y 85 después, los peores resultados en la historia del PSOE. "Hay quien yano le salen las cuentas y está buscando confluencias. Yo no voy a estar en ese tipo de confluencias por arriba, de mesa camilla, buscando el día después cómo arañar algunos votos", ha concluido la presidenta de la Junta.
"NI PACTOS, NI ENGAÑOS"
López, a quien secunda buena parte del antiguo círculo de Sánchez (como Óscar López y César Luena), lleva toda esta campaña insistiendo en que llegará hasta el final, que no se integrará en ninguna de las otras dos candidaturas. Hace solo tres días, divulgó un breve vídeo en el que insiste en que irá “hasta el final”. “Aquí no hay pactos, ni engaños, ni intrigas de ningún tipo”, explicó el exlendakari. Aun así, las especulaciones se suceden. Sobre todo a raíz de que su candidatura anunciara que suspendía los actos previstos este viernes en Galicia. Fuentes de su equipo, sin embargo, señalan que no es ninguna retirada, sino que han decidido cancelar el viaje para seguir de cerca el recuento de avales que lleva a cabo la dirección socialista en la sede del partido, en la madrileña calle de Ferraz.
El dirigente vasco, el único de los tres aspirantes que es diputado, fueel primero en dar el paso. El pasado 14 de enero, horas después de que los socialistas aprobasen la celebración de sus primarias a finales de mayo, López llamó a los líderes territoriales para anunciarles que al día siguiente presentaría su candidatura. A todos, explican varios de ellos, les dijo que se lanzaba para cortarle el paso a Sánchez. Logró el efecto opuesto. El exlíder había estado hasta ese momento abatido, “de luto” según sus colaboradores, pero aquello fue “un revulsivo”. Reactivó sus actos con los militantes y poco después anunció que él también competía. Díaz fue la última en lanzarse. Lo hizo a finales de marzo, en un acto en Madrid.
