El exdirector general de la Guardia Civil, Luis Roldán Ibáñez, condenado a 31 años de prisión por enriquecimiento ilícito, abandonó a las 8.55 de ayer la prisión de mujeres de Brieva (Avila) para disfrutar del puente de la Constitución. Roldán ha cumplido 7 años y 10 meses de prisión y se beneficia desde ayer del tercer grado restringido que le concedió el juez de vigilancia penitenciaria de Valladolid José Antonio Velasco y que le permite salir fines de semana alternos y disfrutar de hasta 48 días de permiso en periodos de seis días.

El condenado salió cinco minutos antes de lo previsto, iba ataviado con un abrigo azul y llevaba una bolsa de viaje roja y una de plástico en la mano. Subió al asiento trasero de un Seat Córdoba de color blanco, donde le esperaba un familiar y un guardaespaldas. Un coche camuflado de la policía, marca Citroen AX, salió tras él. Al cruzar la verja del recinto carcelario se tapó la cara con las manos para no ser filmado por los reporteros.

AGRESION A UN FOTOGRAFO

Los coches enfilaron hacia la autopista A-51 y recorrieron el tramo de 24 kilómetros hasta Villacastín (Avila). Cuando se detuvieron en el peaje, un escolta agredió a un fotógrafo que esperaba al exdirector de la Guardia Civil. Primero trató de evitar que el reportero sacara una instantánea de Roldán, interponiéndose ante la cámara, y cuando el periodista le dijo que hacía su trabajo, el agente lo empujó contra la cabina del peaje.

La comitiva siguió hacia Madrid y enfiló hacia Zaragoza, adonde llegó al filo de las 12 del mediodía. El condenado se alojó en el piso que heredó de su madre, fallecida en octubre pasado. No tendrá que regresar a la cárcel hasta las 22 horas del próximo lunes, ya que el 9 de diciembre es fiesta en Castilla y León.

Su abogado, Agustín Guardia, dijo a este diario que el seguimiento informativo de su cliente no le beneficia y "genera alarma social". "Es el noveno permiso que disfruta y nunca había suscitado tanto morbo", señaló antes de expresar su confianza en que en enero acceda al tercer grado sin restricciones, ya que cuenta con tres ofertas de trabajo serias y una le interesa especialmente. Con trabajo, sólo tendría que ir a la cárcel a dormir.

Guardia dijo que algunos ofertantes de empleo sólo querían publicidad, como era el caso del dueño de una funeraria leonesa que le ofreció un puesto de vendedor y el de un supuesto empresario de Baleares perseguido por estafa. El letrado evitó dar detalles sobre esas ofertas.

CONTROL DE SUELDO Y RENTAS

El ministro de Justicia, José María Michavila, instará a la abogacía del Estado a que proceda contra Roldán para que la justicia le incaute el sueldo y rentas que pueda recibir hasta que satisfaga las deudas pendientes con la sociedad, cuantificadas por sentencia firme en más de 6 millones de euros (1.000 millones de pesetas).