A cara descubierta, Íñigo Errejón y centenares de cargos de Podemos se sumaron este viernes a un manifiesto que busca plantar cara a Pablo Iglesias y su intención de que en el próximo congreso de la formación morada las listas y las propuestas se voten de forma conjunta, como fórmula para tratar de imponerse al número dos, si es que este finalmente decide enfrentarse a él en el llamado Vistalegre II.

A poco más de una semana para que la militancia decida en una consulta cuáles serán las reglas del juego y pueda testarse un anticipo de cuál de las dos almas de Podemos, la pablista o la errejonista, puede gozar de más apoyos, los afines al secretario político lanzaron un manifiesto en el que abogan por que el debate de las propuestas sea previo al de las caras.

Iglesias defendió el lunes que los proyectos políticos y los cargos internos sean votados conjuntamente, para así tratar de imponerse a Errejón, quien de momento no quiere disputarle la secretaría general, pero sí aspira a que triunfe su tesis de mantener el espíritu trasversal con el que nació Podemos, frente a la intención del líder de radicalizar la formación. Si se confronta primero la filosofía y vence el secretario político, el número uno, sea quien sea, tendrá que aplicar la estrategia triunfante.

El debate metodológico es, por tanto, fundamental, y de ahí el movimiento de los errejonistas en busca de apoyos. El manifiesto, titulado ‘Recuperar la ilusión’, aboga por priorizar la contraposición de ideas, para que la asamblea no se convierta en un "combate de boxeo". "Queremos discutir cómo ganar el país, no cómo retarnos entre nosotros", sostiene, además de tildar de"involución democrática" que ahora las votaciones sean conjuntas, ya que en Vistalegre I fueron separadas. "Merecemos un tiempo de reflexión alejado de concursos de popularidad […] No encerremos la discusión en nombres, abramos el debate", reclama.

LAS ADHESIONES

Asimismo, cara al congreso, que Iglesias quiere celebrar del 10 al 12 de febrero, reclama que haya "mayor proporcionalidad" en los órganos de dirección, que la cuestionada comisión de garantíassea "independiente" y un censo abierto.

En el momento del lanzamiento, a las once de la mañana, contaba con 338 adhesiones. Una hora después el marcador había subido a más de 600 entre cargos estatales, regionales, locales. Por la tarde, los inscritos superaban los 2.000, contando con militantes y simpatizantes. Entre ellos, además del propio Errejón, figuran miembros de la ejecutiva, como Pablo Bustinduy, Àngela Ballester o Auxiliadora Honorato, decenas de diputados; la portavoz en el ayuntamiento de Madrid, Rita Maestre, y secretarios autonómicos como el de la Comunitat Valenciana, Antonio Montiel.

Del lado contrario, el cofundador de Podemos Juan Carlos Monedero acusó a los errejonistas de ser "deshonestos" y buscar en los medios "lo que han perdido dentro".