El PNV y Batasuna coincidieron ayer en que las palabras del presidente del Gobierno al anunciar la apertura del diálogo con ETA abren también la vía para que los partidos vascos traten de buscar un acuerdo sobre lo que en Euskadi se ha dado en llamar "derecho a decidir", es decir, el derecho de autodeterminación. Josu Jon Imaz, presidente peneuvista, y Arnaldo Otegi, líder de Batasuna, apuntaron, cada uno con sus matices, que la mesa de partidos que está previsto crear en otoño trabajará para pactar precisamente cómo se materializa ese derecho.
El exquisito cuidado de José Luis Rodríguez Zapatero al decir que el Gobierno "respetará" las decisiones que los ciudadanos vascos adopten libremente, tuvo ayer su efecto. Así, si el jueves todos celebraban la puesta en marcha del diálogo para lograr el final de la violencia, lo que ayer se resaltó fue que Zapatero reconociera que les corresponde a los vascos "adoptar" acuerdos para un "pacto de convivencia" con España.
CASI COMO DOWNING STREET El lendakari, Juan José Ibarretxe, fue el primero en destacar la importancia de las palabras de Zapatero, e interpretó que dejan claro que la decisión sobre el futuro de la sociedad vasca "queda en manos de los que aquí vivimos y trabajamos".
El portavoz de Batasuna, Arnaldo Otegi, alabó como "fundamental" la declaración de Zapatero porque asume "el compromiso" de respetar lo que los ciudadanos decidan. También el sindicato LAB, que dirige Rafael Díez Usabiaga, referente en la izquierda aberzale, valoró las palabras del presidente como un "salto cualitativo" para recalcar que "nunca desde la transición" habían escuchado semejante pronunciamiento de un presidente del Ejecutivo español.
Los partidos nacionalistas venían reclamando de Zapatero una declaración como la que hizo el jefe de Gobierno británico, el conservador John Major, al abrir el proceso de pacificación de Irlanda del Norte con un reconocimiento del derecho de autodeterminación. Sin embargo, fue Díez Usabiaga quien lo recordó ayer para precisar que las palabras de Zapatero no son como las de "la declaración de Downing Street", aunque vino a reconocer que se parecen.
RESERVAS Los partidos compensaron su entusiasmo ante el abierto pronunciamiento de Zapatero con matizadas reservas en torno a las alusiones del presidente al respeto de las actuales normas en vigor. Así, Imaz quiso formular en su comparecencia una "apelación expresa a utilizar todas las posibilidades que permite el ordenamiento jurídico". De hecho, el PNV ha defendido tradicionalmente que, "con voluntad", sería posible leer la Constitución de una forma flexible y abierta en la que podría encajar el reconocimiento del derecho de decisión de los vascos.
También Batasuna trasladó su particular aviso al pedir a Zapatero que ahora convierta sus palabras en hechos "sin poner ningún limite" a la decisión que adopten los ciudadanos.
Ibarretxe y todos los partidos apostaron por pisar el acelerador este verano para que en otoño se ponga en marcha la mesa de partidos, que solo será posible cuando los aberzales dispongan de una marca política legal. Aunque el lendakari da por seguro que eso sucederá pronto, Batasuna no ha dado ningún paso para hacerlo posible.
