El afán del PNV por elevar el listón de sus criticas a España en vísperas de la fecha que mejor resume la rivalidad nacionalista --el Aberri Eguna, que se celebra hoy-- llevó ayer al partido de Iñigo Urkullu a igualar la estrategia de ETA y la expresada por el acuerdo de PSE y PP: a su entender, ambas son "ruinosas" para Euskadi, según afirma en el documento de principios difundido con motivo del Día de la Patria Vasca y titulado Un nuevo futuro para Euskadi .

Los mismos que permitieron al Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero aprobar los presupuestos para el 2010 sostienen que el "pacto de hierro" entre socialistas y populares pretende convertir al País Vasco en una "autonomía más", diluyendo el "hecho diferencial" y "debilitando" las instituciones.

Y es que el de hoy será el primer Aberri Eguna sin un nacionalista en la presidencia del Ejecutivo vasco, lo que ha espoleado el interés del PNV por desacreditar al Gabinete de Patxi López, al que acusan de carecer de rumbo y liderazgo y de ser "incapaz" de afrontar la crisis.

Eusko Alkartasuna (EA) y la izquierda aberzale ilegalizada pasearán hoy juntas su marca soberanista en un marcha que discurrirá entre Irún (Guipúzcoa) y Hendaya (Francia).

Por su parte, el vicesecretario territorial del PP, Javier Arenas, mostró ayer su confianza en López para acabar con ETA. En un mitin en Manilva (Málaga) afirmó que "gracias al PP, hay un lendakari que no ampara proyectos independentistas, por lo que es una ocasión histórica para derrotar el terrorismo".