El PP decidió ayer no mover ficha, todavía, pese a la altísima probabilidad de que su tesorero, Luis Bárcenas, sea imputado por el Tribunal Supremo por el caso Gürtel . El presidente de los populares, Mariano Rajoy, reivindicó una vez más la presunción de inocencia y reiteró que su partido no se ha financiado ilegalmente, pero dejó la puerta abierta a actuar y pidió para ello que la junta directiva del PP, reunida ayer, confíe en las decisiones que eventualmente tome la cúpula de la fuerza política.
En su intervención, Rajoy repitió las palabras pronunciadas por él mismo el pasado mes de marzo, insistió en que el PP no ha recibido "ni un solo euro" corrupto y reclamó el derecho a la presunción de inocencia, a la vez que garantizó que "si algún militante ha hecho cosas no aceptables" el partido actuará en consecuencia. Esta misma línea de prudencia fue adoptada por otros dirigentes populares, como la portavoz parlamentaria, Soraya Sáenz de Santamaría, quien afirmó que si finalmente se produce la imputación habrá que actuar. El presidente fundador del partido, Manuel Fraga, dijo a la entrada a la reunión que Rajoy "sabe lo que tiene que hacer" al respecto y que si conviene se tomarán decisiones "con firmeza". Sin embargo, otra de las posturas fue la del apoyo incondicional a Bárcenas, un respaldo que llegó por parte de sus compañeros de partido en Cantabria, comunidad por la que el tesorero de los populares es senador. Así, el líder del PP cántabro, Ignacio Diego, afirmó que Bárcenas se siente "indefenso y maltratado por una parte de la justícia" y que sigue sin saber nada de los hechos por los que puede ser imputado por el alto tribunal. Siguiendo esta tesis pero yendo todavía mucho más allá en el ataque a la justicia, el portavoz del PP y vicesecretario de Comunicación, Esteban González Pons, acusó implícitamente al Gobierno de estar detrás de la posible imputación de Bárcenas debido a que el PSOE ha perdido las europeas del pasado 7 de junio. González Pons afirmó que la única novedad que ha habido en el caso Gürtel para que la fiscalía vea ahora indicios contra el tesorero de los populares es que "el PP le ha ganado las elecciones al Gobierno". En declaraciones a la COPE, el portavoz popular, en un tono muy despreciativo, atribuyó el caso al "mal perder de Zapatero, María Teresa Fernández de la Vega, Rubalcaba y toda la pandilla del Gobierno".
VERG ENZA AJENA El PSOE mostró su indignación por estas palabras, que calificó de escandalosas y causantes de vergüenza ajena. Los socialistas, sin embargo, fijaron sus ataques en Rajoy, al que le exigieron que actuara de forma inmediata respecto a los altos cargos aforados como Bárcenas, el diputado Jesús Merino y el todavía eurodiputado Gerardo Galeote. Según el PSOE existen ya suficientes sospechas, evidencias y pruebas para tomar decisiones.
