Hay dos citas inminentes en la agenda socialista para "dar un paso de gigante en la estabilidad territorial". José Luis Rodríguez Zapatero animó ayer así a su partido a echar el resto para ganar las próximas elecciones en Euskadi, y consideró descontada una victoria en Galicia.

Para reforzar la candidatura de Patxi López, ofreció el "aval político" del PSOE a una reforma del Estatuto de Guernika siempre que ésta venga precedida de "un acuerdo allí". "Tendremos un estatuto mejorado en vez de un plan imposible", prometió.

Zapatero respondió al planteamiento plebiscitario que está haciendo el PNV de los próximos comicios autonómicos. "Son unas elecciones más; las que corresponden tras agotarse la legislatura", describió el líder socialista. E incidió: "Se vota quién gobernará el País Vasco. Sólo eso".

´PLAN IBARRETXE´ A renglón seguido dejó claro que el 17 de abril "no se dirime algo que no se puede dirimir exclusivamente allí ni por medio de unas elecciones", en referencia al plan Ibarretxe , para cuya nueva negociación pide la fuerza de los votos el PNV.

A pesar de la normalidad de la cita electoral, Zapatero reconoció que "no son unas elecciones cualquiera". E invitó a los vascos a apostar por "más autogobierno, entendimiento entre los partidos y unidad por la paz", los tres capítulos que resumen la oferta electoral que lidera Patxi López. El comité federal ratificó por unanimidad las listas electorales del PSE para el 17 de abril.

SOLUCIONES A LA CRISIS El líder de los socialistas vascos intervino ante el comité federal para explicar su programa, que resumió como un "contrato con los ciudadanos" en el que se ofrecen soluciones "para salir de la crisis en la que nos ha metido Juan José Ibarretxe".