El candidato regionalista, Miguel Angel Revilla, fue investido ayer presidente de Cantabria con los votos de PRC y PSOE, que suman 21 diputados, y con la oposición de los 18 representantes del PP.

Revilla sustituye, tras ocho años en la presidencia de Cantabria, al líder del PP, José Joaquín Martínez Sieso, con quien mantuvo un duro enfrentamiento en el debate parlamentario. Martínez Sieso pidió al regionalista que renunciara a la investidura para convocar unas nuevas elecciones "si está tan seguro de que es el mejor presidente" para la comunidad autónoma.

La secretaria general del PSC-PSOE y futura vicepresidenta de Cantabria, Lola Gorostiaga, defendió el pacto con el PRC, en virtud del cual fue investido Revilla, y destacó que con esta alternancia en el poder "se sustituye un proyecto agotado por un aire nuevo para Cantabria".