Gobierno y PP han encontrado hoy un nuevo motivo de confrontación, esta vez por el alto coste de las tazas de WC y urinarios de la Presidencia del Gobierno, que el Ejecutivo atribuye a su política de higiene y que a la oposición le hace preguntarse cuánto "germen desatado corre por la Moncloa".

La ministra de Administraciones Públicas, Elena Salgado, y la diputada popular Dolors Nadal han intercambiado sus impresiones sobre higiene y despilfarro durante la sesión de control al Gobierno en el Congreso.

Nadal ha preguntado a la ministra cómo se compagina la austeridad que propugna el Gabinete de José Luis Rodríguez Zapatero con el contrato de casi 45.000 euros en el alquiler de tazas de WC "tuneadas" para "esa corte del faraón en la que se ha convertido la Presidencia del Gobierno".

Salgado, con semblante serio, se ha alegrado de que los españoles "por fin" vean hacia dónde conduce el PP su política: "a fijar la atención en los urinarios de Presidencia".

"Para satisfacer su curiosidad le diré que el contrato de equipos de protección y desinfección en las tazas WC y los urinarios en zonas de gran confluencia de personas se encuadra en la política de higiene y de prevención en el trabajo", ha justificado la ministra.

Y, a fin de acentuar su argumento, Salgado ha recordado que el actual alquiler es la continuación de un contrato de suministro en régimen de arrendamiento que se viene renovando desde 1999, "también durante los años en que Mariano Rajoy fue vicepresidente, y el contrato de esos años está firmado por Ana Pastor".

A Nadal no le ha parecido suficiente la explicación, y aunque ha considerado positiva -incluso "conmovedora"- la limpieza e higiene de la que hace gala Moncloa, ha considerado la medida quizá un poco "cara".

"Las familias españolas lo están pasando muy mal, el 20 por ciento de los hogares vive por debajo del umbral de la pobreza, y Zapatero se dedica a derrochar el dinero de los españoles. ¿Tan mal huelen las políticas socialistas que tienen que utilizar dispensadores de fragancias? ¿Pero tanto germen desatado corre por La Moncloa", ha preguntado alarmada.

La diputada popular ha recordado al Gobierno que la austeridad "no es un concepto que pueda utilizar a su antojo" y "requiere poner los recursos públicos al servicio de los ciudadanos, en ningún caso a satisfacer excentricidades de presidente".

"No es ético, no puede ser que Zapatero dedique dinero público a 'tunear' los rincones más íntimos de su Palacio". Salgado se ha aferrado al ahorro y al término "ético" mencionado por Nadal y, tras acusar al PP de volver a instalarse en la "mentira permanente" y abandonar el "maquillaje de la moderación", se ha preguntado por qué -si a los populares les preocupa tanto la ética- mantienen en sus puestos a altos cargos "imputados en graves delitos allí donde gobiernan".

"¿De qué austeridad habla, de la que practican ustedes donde gobiernan en sanidad o educación, o de la que practican subiendo el transporte un 8 por ciento, como en Madrid? ¿De qué aumento de altos cargos habla, de los de Madrid o de la Comunidad Valenciana?", le ha preguntado.