El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, anunciará mañana en su comparecencia extraordinaria sobre economía en el Congreso, nuevas medidas para combatir la crisis, principalmente destinadas al mercado de trabajo. Esta comparecencia a petición propia del presidente del Gobierno se produce después de que no acudiera el pasado agosto al debate sobre financiación autonómica gracias al apoyo de ICV.

En ella se conocerán las nuevas medidas que llevará a cabo el Ejecutivo para combatir la crisis, muchas de ellas destinadas a la recolocación de los trabajadores de la construcción que han perdido su trabajo. Zapatero ya garantizó el pasado domingo que, pese a las dificultades económicas que atraviesa España, mantendrá su apuesta por las políticas sociales y anunció que las pensiones mínimas subirán el 6 por ciento el próximo año.

El pleno de esta semana se celebrará en un contexto en el que en los últimos días han continuado produciéndose malos datos económicos, como el aumento del paro en 103.085 personas en agosto, lo que elevó el desempleo registrado a más de dos millones y medio de personas, una cifra que no se alcanzaba desde febrero de 1998. La subida del paro fue del 4,2 por ciento con respecto al mes anterior y de casi el 25 por ciento en un año, e hizo que al cierre de agosto hubiera registradas como desempleadas 2.530.001 personas.

Un dato marcado posteriormente por las palabras del ministro de Trabajo, Celestino Corbacho, quien se mostró a favor de suprimir la contratación de inmigrantes en origen, con las consiguientes críticas de sindicatos y asociaciones de inmigrantes que obligaron a Fernández de la Vega a desmentirlo de forma rotunda. Además, se han producido nuevas previsiones a la baja para la economía española, como es el caso de Funcas que ya pronostica un decrecimiento del 0,5 por ciento para 2009.

La posibilidad de recesión "está ahí"

Por su parte, el Gobierno considera, como dice el ministro de Economía, Pedro Solbes, que la economía española "está rozando el larguero" del crecimiento cero y que la posibilidad de recesión "está ahí", aunque asegura que el Ejecutivo no trabaja con esta hipótesis. Así, en el segundo trimestre el alza intertrimestral fue del 0,1 por ciento, lo que supuso un frenazo al crecer dos décimas menos que en los tres primeros meses, y el crecimiento interanual se situó en el 1,8 por ciento, nueve décimas menos que en el primer trimestre.

Este crecimiento intertrimestral del 0,1 por ciento tiene su referencia más cercana en el tercer trimestre de 1993 cuando la economía no creció. En cambio, la inflación parece que puede dar un respiro ya que el indicador adelantado del Índice de Precios de Consumo Armonizado (IPCA) de agosto se redujo en tasa interanual cuatro décimas como consecuencia, principalmente, de la moderación del alza de crudo, y se situó en el 4,9 por ciento.

En su anterior intervención extraordinaria sobre economía en el Congreso el pasado 2 de julio, Rodríguez Zapatero, admitió ya las "serias" dificultades por las que pasaba la economía española y su "debilitado" crecimiento, aunque descartó la recesión y se resistió a hablar de crisis, lo que le enfrentó a todos los grupos de la oposición.

El debate servirá también para que los diferentes grupos políticos dejen entrever su postura respecto a los Presupuestos Generales del Estado, para cuya aprobación el Gobierno necesita por lo menos seis votos más de los que dispone.