El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, asiste en la Academia de Artillería de Segovia, donde llegó poco antes de las 10:30 horas, al funeral por el brigada Luis Conde de la Cruz, asesinado por ETA en Santoña.

En un ambiente de silencio y con escasa presencia de público, Zapatero ha sido recibido al pie de su coche oficial por el presidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera; el del Congreso de los Diputados, José Bono; los ministros de Defensa e Interior, Carme Chacón y Alfredo Pérez Rubalcaba, respectivamente, y el jefe del Estado Mayor del Ejército, Fulgencio Coll.

Posteriormente Zapatero ha saludado al presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla; al jefe del Estado Mayor de la Defensa, José Julio Rodríguez; al delegado del Gobierno en Castilla y León, Miguel Alejo; al alcalde de Segovia, Pedro Arahuetes, y al general director de la Academia de Artillería, Ricardo Sotomayor.

En el lugar del funeral se encuentran también el consejero de Interior del Gobierno Vasco, Javier Balza; el presidente del PP, Mariano Rajoy, la portavoz parlamentaria del PP en el Congreso, Soraya Saez de Santamaría; el vicesecretario general del PSOE, José Blanco; el coordinador general de IU, Gaspar Llamazares; el secretario general del PSCL. Óscar López; la eurodiputada de UPYD Rosa Díez.

Por expreso deseo de la familia, la ceremonia se celebra en la más estricta intimidad, sin cámaras, aunque se ha permitido el acceso de vecinos y ciudadanos que han querido asistir a esta celebración religiosa.

El acto se desarrolla, en una mañana fría y nublada, en el patio de armas del centro militar en el que trabajaba el brigada, que es el claustro del antiguo convento de San Francisco.

La capilla ardiente ha permanecido abierta durante toda la noche en la capilla del acuartelamiento, donde el féretro ha estado escoltado en todo momento por alumnos de la Escala Básica de Suboficiales, compañeros del hijo del brigada asesinado.

También han permanecido junto al cadáver toda la familia del brigada, así como suboficiales y mandos del centro militar. La ceremonia, que oficia el obispo de Segovia, Ángel Rubio, durará unos 45 minutos. Al finalizar la misma el brigada recibirá a título póstumo la Cruz del Mérito Militar con distintivo amarillo.