Ni por miedo ni por debilidad. Fue porque salvar la vida al reo puede evitar nuevos atentados. José Luis Rodríguez Zapatero dio ayer ante el comité federal del PSOE su primera explicación pública sobre las razones que llevaron al Gobierno a trasladar a Iñaki de Juana Chaos a Euskadi. El jefe del Gobierno, que recibió el apoyo unánime del partido a esa medida, reiteró que el grave estado de salud del etarra aconsejó el traslado, pero negó que la decisión de hacerlo se deba al temor por las consecuencias que habría producido su muerte en prisión. "No es el miedo ni la debilidad lo que le ha salvado. Es nuestro valor y nuestra responsabilidad", sentenció el dirigente socialista.

El líder del PSE, Patxi López, incidió durante el debate posterior al discurso de Zapatero en la idea de que la llegada del preso a Euskadi servirá para alejar la amenaza de la violencia. "La decisión es inteligente porque impide convertir a De Juana en héroe o mártir y evita un estallido de violencia en el País Vasco", dijo. Su razonamiento fue considerado tan acertado por sus compañeros de filas que todos los barones socialistas lo hicieron suyo y renunciaron a insistir sobre la cuestión. El expresidente Felipe González, que no asistió al cónclave, aseguró que de ser aún presidente, habría hecho "lo mismo".

"Un hombre sin piedad" Rodríguez Zapatero reconoció que el traslado ha evitado "la muerte de un hombre que mató a 25 personas, que no conoce la piedad ni el arrepentimiento". Fue su manera de asumir el coste social de la decisión. Pero consideró que es obligación del Gobierno "luchar por el valor supremo de la vida" y trabajar para el "objetivo de evitar que haya más muertes por terrorismo".

Una vez explicada la medida, arremetió contra la reacción del PP. Dirigentes conservadores se han sumado a las protestas de varias asociaciones de víctimas y Mariano Rajoy avanzó el viernes que convocará a los españoles contra el Gobierno. Una de esas marchas culminó la madrugada del sábado en el ataque a la sede socialista en Alcalá de Henares.

El líder del PSOE equiparó la respuesta del PP a la decisión de trasladar a De Juana con la que ha tenido a cualquier medida referida al terrorismo desde que empezó la legislatura: "Ya solo hacen oposición con el terrorismo, con todo, da igual: el sumario del 11-M, treguas, atentados, sentencias o decisiones penitenciarias". Pese a esa actitud, Zapatero auguró que los españoles no se dejarán "embaucar" por esa estrategia basada en "emponzoñar la convivencia con mentiras", porque, dijo, "se les nota demasiado el rencor y la desesperación" y solo actúan por "intereses estrechos de partido".

Beneficios anteriores "Violencia, ni verbal. Conmigo que no cuenten", dijo el presidente, que aseguró que si por "ahorrarse un desahogo" contribuye a calmar los ánimos, "merecerá la pena". Pese a esa actitud constructiva, recordó los beneficios penitenciarios que aplicó el Gobierno de José María Aznar a los presos de ETA. "Los mismos que hoy nos insultan son los que por responsabilidad concedieron todo tipo de permisos y beneficios penitenciarios a los presos de ETA. Los mismos que cuando eran ministros firmaban reducciones de condenas y excarcelaciones de terroristas ahora ponen el grito en el cielo", lamentó el presidente.