Adolfo Díez Collado tiene 85 años de los cuales 20 lleva jubilado y cobrando la paga del Gobierno, la cual ve "muy justa, porque solo me llega hasta que entro en la farmacia" ya que muchos de los medicamentos que necesita no entran en la Seguridad Social y explica que todo se le va "en la botica y en el mosto". Además, cuenta sonriente que "con lo poco que me sobre lo ahorro para comprarme un Mercedes que me lleve al camposanto, que me lo laven bien que lo necesitaré en pocos días". La gracia de Adolfo, los remanentes de la venta de su taller mecánico, Taller Regino y algunas "cosinas más" él y su mujer siguen adelante y gastan el dinero "en lo que podemos, comprar nuestras cosas y la comida".