El Ala 23 de la Base Aérea de Talavera la Real celebró ayer la festividad de su patrona, Nuestra Señora de Loreto, y sus 50 años de vida, con un emotivo acto "por la muerte accidental, recientemente ocurrida en acto de servicio, de uno de sus componentes", según afirmó el coronel jefe de la Base, Antonio Alejandro Solano Brotóns.

Solano anunció además que el próximo año se inaugurará un monumento que incluirá el estabilizador de cola del avión que ocupaba el piloto fallecido, el capitán instructor Manuel Rivera Hernández, que el 30 de abril pasado murió al caer su aparato a un descampado situado entre la base y Balboa, cuando realizaba maniobras de acrobacia, según informa la agencia Efe.

En esta celebración se quiso recordar también la creación de la base hace medio siglo, por lo que el coronel jefe indicó que en el 2004 se realizarán unas jornadas de puertas abiertas, una exhibición acrobática de patrullas de vuelo, procedentes de Francia, Italia, Portugal y España, y en mayo se reunirá a los coroneles jefes que han comandado la instalación militar en este medio siglo de existencia.

Asimismo, Solano apuntó que se "acaricia la idea" de que las celebraciones sean presididas por el Rey o el Príncipe.

En esta Base existen ya siete F-5 "debidamente modernizados" y para finales del 2004 se dispondrá de los catorce restantes.

Tras pasar revista a las fuerzas en formación, el coronel jefe, pronunció un discurso dirigido a los jefes, oficiales y suboficiales, y autoridades civiles mediante el cual resaltó el esfuerzo de todos los componentes de esta Base Aérea desarrollado durante los 50 años de su creación "para alcanzar la situación pujante en la que actualmente se encuentra el Ejército del Aire". En este sentido resaltó que en este medio siglo el Ala 23 ha realizado alrededor de 240.000 horas de vuelo para lo que se ha trabajado más de 10.000.000 horas en tierra.