Caja Extremadura obtuvo el año pasado un beneficio neto atribuido de 38 millones de euros, lo que supone un 14,27% más que en el ejercicio anterior, según datos facilitados por la entidad extremeña, que celebró ayer asamblea general ordinaria.

En la reunión del máximo órgano de gobierno de la entidad se dio a conocer, para su aprobación, la gestión llevada a cabo durante el ejercicio del 2005, en el que Caja Extremadura siguió siendo "líder indiscutible" del sistema financiero extremeño.

El resultado después de impuestos obtenido por Caja Extremadura durante el año pasado fue de 36,4 millones de euros, con un índice de rentabilidad sobre activos totales medios ligeramente superior a la media del sector de las cajas de ahorros.

En opinión de la entidad, los factores que han permitido esta evolución positiva del beneficio durante el año 2005 están relacionados con un adecuado ritmo de crecimiento de la actividad financiera en combinación con una eficaz política de precios.

Según los datos presentados, los recursos ajenos de la entidad se situaron en 4.527,1 millones de euros, lo que representa un incremento relativo del 10,9% respecto al ejercicio anterior.

Dentro de este conjunto, la confianza depositada por el sector privado permitió que los recursos a la vista crecieran un 13,75%, mientras que los recursos a vencimiento mantuvieron una tasa de variación interanual en el ejercicio del 6,45%.

En cuanto a la inversión crediticia, el saldo de los créditos concedidos al finalizar el año 2005, sumaron un total de 4.023,3 millones de euros, una tasa de crecimiento anual equivalente al 21,49% respecto al año anterior. La inversión en obra social fue de 9 millones de euros, un 30,89% del beneficio.